¿Es este el soundrack del
libro egipcio de los muertos? El metal nunca deja de sorprendernos. Egipto está
en el mapa y de gran manera. Crescent ha tomado por sorpresa la escena para
demostrarnos que erran quienes creen que un pasaporte o un determinado sello
pueden brindarnos seguridad de calidad y quienes están fuera es porque carecen
de ella. Este ha sido un formidable año para la banda pues lograron editar su
primer larga duración quien los catapultó hasta la propia meca del Metal,
Wacken, además de realizar una gira por Europa. Algo impensable para una banda
egipcia, donde la escena se mueve aún de manera más que subterránea y deben
luchar contra los prejuicios de las personas y la obtusa religión que les
persigue y obstruye su camino. Es admirable la determinación, calidad y
capacidad de esta banda para sobreponerse a todo sin perder su identidad.
Pyramids Slaves no es más que un álbum de Death Metal
con matices Black, con una atmósfera oscura, sombría y demoledora. Se nota la
influencia propia de su país y el título del disco es más que perfecto para
encajar con el estilo de esta banda. Esos sonidos arábigos y tétricos salidos
de las más profundas catacumbas le dan a este trabajo un sonido muy propio.
Podría cualquiera pensar con esto en Nile, pero no es así. La banda maneja un
estilo diferente, no hay un abuso de sonidos faraónicos sino que por el
contrario es sólo una atmósfera que te transmite esos pasajes desgarradores del
libro egipcio de los muertos. Este es un álbum para succionar tus entrañas y
embalsamar tu cuerpo con una descarga pura de Death Metal venido del más allá
portando espíritus ancestrales de antiguos sacerdotes.
Crescent no se ha guardado
nada en este trabajo. Se nota el hambre de gloria de esta banda, buscando
apoderarse cuanto pueda de la escena y de tus sentidos mismos; pero lo más
interesante de ello es que lo logran. Un trabajo muy bien logrado, sólido y que
no tiene nada que envidiarle a lo que se realiza en otros lugares del mundo. Es
hasta llamativo que la banda siga sin un contrato de algún sello pues este
trabajo es más que interesante y merece el apoyo y soporte de algún buen
contrato para su distribución. Notable también la aportación vocal que le da
Ismaeel Attallah pues su voz cruda y brutal se combina con todos los demás
sonidos de manera formidable para hacer de este disco aún más macabre de lo que
de por sí ya lo es con toda la atmósfera que contiene.
Este es un trabajo
independiente y con algunos esfuerzos propios así que es fácil adivinar que en
cuestiones meramente técnicas referentes a la producción no es perfecto, mas en
la ejecución sí lo es o al menos tanto como está a la altura de la banda.
Considero que la mayor virtud y fortaleza de este trabajo es la combinación de
potencia y brutalidad con los sonidos oscuros y sombríos típicos de la antigua
cultura egipcia. Pyramids Slaves es una reivindicación de la escena subterránea
como la escena que cuenta con mayor honestidad y que vale la pena escudriñar un
poco para descubrir gemas de mucho valor. Crescent es una banda con mucho
potencial que puede llegar muy lejos mientras se mantenga al menos a este nivel
pero no me cabe duda alguna que la banda se superará a sí misma. Egipto tiene
un digno representante en la escena metal mundial con Crescent.
Track list:
01 Gates of the Sun
02 Ra-Men-Kheper
03 Crown Of Pestilance
04 An Ode To Qadish
05 Pyramid Slaves
06 Temple Of The Divine Gods
07 Fallen Kingdom Of Men
Lineup:
Moanis Salem – Bajo
Amr Mokhtar – Batería
Ismaeel Attallah – Guitarra Líder,
Voz
Mohamed Adel – Guitarra
Rítmica
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